Tonin Casa

Tonin Casa sin duda tiene una larga historia: empezaron hace más de 40 años, a partir de cero, como siempre decimos. El primer paso fue producir zapateros. Querían que su producto fuera el mejor ejemplo posible dentro de la artesanía italiana, por lo que pidieron a los artesanos más expertos que hicieran lo que mejor sabían: construir muebles impecables.

Este objetivo, que sigue siendo su principal objetivo, less condujo hacia una producción más moderna en los años 90. Llamaron a diseñadores y arquitectos, tuvimos la oportunidad de conocer a las personas más creativas. Querían una nueva ola para dar forma a la tradición italiana. Fue difícil y emocionante, y les hizo crecer cada vez más rápido; les enseñó qué necesitábans para crear productos llenos de energía y empatía, productos pensados para formar parte de la vida de sus propietarios para siempre. 

Para ello, construyeron su propia casa: un centro productivo situado en su querida región, pensada para permitir a la gente trabajar y pensar de la forma más abierta y amplia posible; dos departamentos de ventas que constantemente se desafían para proporcionar el mejor servicio; una división de contrato para crear productos totalmente personalizados; una sección técnica y de estilo para dar forma a nuevos conceptos y desarrollar nuestro escaparate; y un departamento de marketing para mostrar al mundo que la creatividad no se limita a los artículos vendidos. El lugar donde empezaron a trabajar muestra quiénes son. Eso son ellos, hasta el momento. Y no paran de mejorar.