¿Qué tipos de muebles de salón tenemos?
Las librerías y estanterías resultan fundamentales a la hora de amueblar el salón. Se puede escoger entre una gran variedad de estilos: rústico, vintage, colonial, nórdico, industrial... Las hay de caña, de madera o metálicas. La Sapiens, por su parte, es muy popular y se utiliza, fundamentalmente, para guardar libros, CD o DVD. Se puede escoger entre diferentes alturas. La nórdica Arundel, por ejemplo, combina cubos yuxtapuestos y desnivelados. Aunque los más tradicionales seguramente opten por los muebles auxiliares con dos huecos. Las de tipo escalera encajan a la perfección en el estilo industrial.

Librería Varila River by Bodonni
Mesas de centro
Otros objetos esenciales en un salón son las mesas (tanto de centro como las esquineras). Deben ser resistentes pues, a la larga, han de soportar diferentes pesos. En las más modernas, se opta por el cristal y las patas metálicas, con formas redondas o rectangulares. Aunque también las hay triangulares, con un cierto aire cubista. Las de caña o cuerda, que habitualmente encontraríamos en exteriores, también cobran especial protagonismo. En cuanto a las mesas auxiliares, suelen combinar con las de centro y pueden reemplazarse directamente por pufs o cajas de madera o mimbre.

Mesa de centro nogal y lacado Porti
Butacas, sillas, sofás y sillones
Pero ¿qué sería de un salón sin butacas, sillas, sofás y sillones? Los sofás cama siguen siendo un imprescindible, lo cual no merma, en ningún caso, el diseño. Así, el cliente puede decantarse por sofás de estilo retro con líneas bien definidas en colores blancos o grises (como los de la marca Roger o Rolf) u optar por el más descarado vintage de estampados en colores de Corade. Las mecedoras nórdicas también han venido para quedarse, así como las austeras butacas Land, que se convierten en cama rápidamente. Los diseñados en forma de labios o de coche se emplazarán en los ambientes más modernos.

Butaca moderna Kinsey
Mueble de televisor
Por último, no podía faltar tampoco el imprescindible mueble de televisor. Los hay estrictamente funcionales, donde quepa en exclusiva el televisor (como un modelo Namsen), o bien aquellos que incorporan cajones y, en realidad, sirven también de aparadores. Dentro de estos últimos modelos, el estilo vintage e industrial es muy recurrente. Se llevan con las patas diminutas al descubierto aunque, dentro del estilo minimalista, los aparadores se asientan directamente sobre el suelo y en ellos se apuesta por una posición baja del televisor.

Mueble tv bajo industrial Loft
Lámparas, alfombras, cuadros o espejos
En definitiva, el salón sigue siendo esa estancia principal del hogar que, no en vano, también se denomina living-room. No nos olvidemos, por tanto, de esos otros accesorios esenciales en todo salón que se precie, como lámparas, alfombras, cuadros, espejos o mesas de comedor (en el caso de que se encuentren unidos). Las lámparas de pie, las alfombras en gris metalizado, los botelleros, los ventiladores (para lugares calurosos), los espejos vintage o las cómodas altas son tan solo algunos ejemplos de todo lo que se puede poner en un salón, en función de los gustos del comprador.