La piel es el material de tapicería que más perdura y es por esto que son cada vez más quienes lo eligen; es resistente al fuego, no se quema ni derrite fácilmente y es muy difícil de perforar. Con el correr de los años la piel embellece tornándose más cómoda y suave, puede incluso durar toda la vida si se la sabe cuidar; los muebles que están tapizados en un 100% piel tienen un promedio estimado de durabilidad de hasta cuatro veces mayor a los tapizados con cualquier otro tipo de recubrimiento; poseen una alta resistencia contra rasguños ó rasgaduras y la humedad nunca permanece en su superficie.
El aroma es otra característica fundamental de los cabeceros de piel, éstos poseen un aroma fresco y limpio que solo la piel genuina puede otorgar; se sugiere que cuando compremos un mobiliario de este estilo, cerremos la puerta de la habitación y cuando volvamos a entrar notaremos un “olor” diferente, jamás percibido con un mueble común.
Y ya por ultimo destacar que la piel resulta un material más fácil de limpiar y de mantener que otros y aunque supone una mayor inversión inicial, a largo plazo se amortiza con su uso y con su durabilidad.